Capsula

Reforma de ático

En un terrado de la Barceloneta se sitúa una infravivienda de 20 metros cuadrados con una terraza el doble de grande que el interior. Su nuevo propietario refleja los cambios de gentrificación y globalización de Barcelona: es un nómada digital y sólo usará la vivienda para pasar temporadas, principalmente en verano.

Adaptar este antiguo badalot a vivienda requiere aislar y proteger principalmente del sol. Proponemos un artefacto a medida, ligero y motorizado que como una máquina regula la radiación solar. Diez persianas de madera, iguales a las que se utilizan desde hace siglos, se colocan en rulos en la cubierta. A través de unas guías se deslizan y cierran la casa en una única cubierta transformando las terrazas en umbráculo.

Las referencias son obvias y beben del cercano Umbracle proyectado en 1883 por Josep Fontseré en el parque de la Ciutadella pero también de las fantasías tecnológicas propuestas por Archigram en la década de los 60s. Todo ello para hacer frente a una realidad muy contemporánea, que es la necesidad por adaptarnos a la crisis climática que sufre el planeta.