Ático en el Eixample

Barcelona, España

Reforma de un piso en el Eixample

“No se trata de muros, sino de muebles que articulan el espacio. No se trata de puertas, sino de paredes que aparecen y desaparecen. No se trata de tapar y bloquear, sino de insinuar y reflejar”

Se construye un espacio abierto y fluido que se articula a través de los elementos de mobiliario. Estos distribuyen el programa funcional y otorgan privacidad allí donde se necesita. El espacio fluido y dinámico se transforma gracias a correderas que se ocultan en el mobiliario. Estas paredes son un elemento mágico que aparecen y desaparecen cambiando la espacialidad de la arquitectura.

La materialidad que se utiliza es antónima: mate y especular. Los elementos deslucidos están bañados en blanco y negro, ya sea madera de roble o maple teñido en oscuro; los paramentos verticales son blanco puro. Los elementos reflejantes se reservan para los aceros y el techo. Acero inoxidable y aluminio configuran las puertas y parte del mobiliario. Con este sutil juego de reflejos se distorsiona la percepción del espacio.

El color se reserva para puntos singulares, verde penicilina y rojo teja para los elementos de estructura. El crudo para todos los exteriores en un efecto dicotómico entre exterior e interior.

  • Cliente

    Privado

  • Equipo

    Jaime Prous, Antón Monedero, Carlota Solé

  • Colaboradores

    Marc Seguí

  • Superficie

    150 m²

  • Año

    2020

  • Categoría

    Construido | Reformas

  • Fotografía

    José Hevia